Hoy, 17 de abril de 2024, se llevó a cabo la apertura oficial de la 14ª Asamblea de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos. Angola ocupa la vicepresidencia junto con la República Dominicana, Georgia y la República de Irak, bajo la presidencia de Ruanda. Angola estuvo representada por el Ministro de Energía y Aguas, João Baptista Borges, y por el Embajador de Angola en los Emiratos Árabes Unidos y Representante Permanente ante la IRENA, Júlio Maiato.
El día estuvo dedicado a la presentación de la visión ejecutiva de IRENA en una sesión plenaria de alto nivel sobre la triplicación de las energías renovables y a las declaraciones oficiales de los Estados miembros, donde los países informaron sobre el cumplimiento de las metas de implementación de energías renovables de los 169 países miembros de la organización.
El Embajador Júlio Maiato, en su calidad de Representante Permanente de Angola ante la IRENA, moderó la última sesión de trabajo del día como facilitador de las discusiones.
Hablando sobre la 14ª Asamblea de IRENA, el Ministro João Baptista Borges expresó su satisfacción por la elección de Angola para la Vicepresidencia de la Asamblea y felicitó a Ruanda por su excelente labor como Presidente, así como a los otros Vicepresidentes, República Dominicana, Georgia y la República de Irak.
João Baptista Borges señaló que África es particularmente vulnerable al cambio climático, y diversos factores contribuyen a esta vulnerabilidad. “Angola no es una excepción; problemas como sequías, escasez de agua, desertificación y falta de infraestructuras resilientes son algunos de los desafíos que enfrentamos”, dijo.
Informó que en los últimos años, Angola ha experimentado un crecimiento exponencial en su capacidad instalada de producción de energía eléctrica, pasando de 2,4 GW en 2015 a 6,2 GW en 2023. La generación hidroeléctrica aumentó del 39% al 60%, mientras que la generación térmica disminuyó del 61% al 36% en el mismo período.
Este desarrollo en la matriz energética se logró gracias a importantes inversiones, destacando la conclusión del proyecto hidroeléctrico de Laúca, con una capacidad de 2 GW. Además, está en marcha la construcción del proyecto hidroeléctrico de Caculo-Cabaça, que contribuirá a alcanzar la meta de 9 GW de producción.
El Ministro añadió que Angola continuó con la reestructuración de su matriz energética, concluyendo en 2022 las plantas fotovoltaicas de Biópio con aproximadamente 188,80 MW y Baía Farta con 96,70 MW, las cuales contribuyen con aproximadamente el 4% de la matriz pública de producción eléctrica, permitiendo un ahorro anual de 3 millones de toneladas de combustibles fósiles y una reducción de emisiones de dióxido de carbono de 9 millones de toneladas. La matriz de producción de electricidad también incluye la primera fase de la planta fotovoltaica de Caraculo con aproximadamente 25 MW, en un proyecto que prevé alcanzar los 50 MW.
Las acciones estratégicas del sector resultaron en un aumento de la tasa de electrificación al 43% y una disminución simultánea del consumo anual de diésel en las plantas termoeléctricas de 1,36 mil millones de litros en 2015 a aproximadamente 560 millones de litros en 2023, una reducción de casi el 60% en ocho años.
El Ministro de Energía y Aguas afirmó que los desafíos aún son enormes, dada la necesidad de garantizar la expansión de la red de transporte de energía para distribuir un total de 2 GW de energía disponible, incluyendo su interconexión con otros países en el marco del comercio internacional de energía intraafricano, en particular con Namibia y la República Democrática del Congo. Angola pretende obtener diversas ventajas con la comercialización del excedente de energía en el mercado regional.
En relación con estos esfuerzos, destacó que Angola está llevando a cabo importantes reformas en su marco legal del sector eléctrico, incluida la creación del régimen legal para los Productores Independientes de Energía, que disfrutan de privilegios específicos bajo la legislación vigente, actuando en un régimen de libre competencia de mercado y teniendo libertad contractual para la venta de energía al sector eléctrico público mediante la celebración de Contratos de Adquisición de Energía con el Operador de Mercado.
Finalmente, habló sobre el Plan de Acción del Sector de Energía 2023-2027, alineado con la Agenda a Largo Plazo 2050, que prevé la continuidad de la diversificación del mix energético para incorporar al menos un 72% de energías renovables, incluidos 1,2 GW de energía solar para 2027, con el objetivo de alcanzar una tasa de electrificación del 50%. Esto implicará una inversión total de aproximadamente 12 mil millones de dólares estadounidenses, con un papel crucial para las instituciones financieras y el sector privado.
Este año, se espera que el proyecto de construcción de parques solares fotovoltaicos se complete en los próximos años, aumentando la capacidad instalada de generación solar fotovoltaica en 584,50 MW inyectados a la red y 90 MW con 25 MWh de almacenamiento con baterías.
Recientemente, se aprobaron dos importantes proyectos de electrificación en las provincias del Este y Sur de Angola, que proporcionarán acceso a la electricidad a más de 6 millones de habitantes en 132 localidades. Estas soluciones incluyen principalmente sistemas solares con acumuladores, redes de distribución y sistemas solares individuales, lo que reducirá el tiempo de construcción de las infraestructuras.
Al margen de la Conferencia, el Ministro de Energía y Aguas sostuvo reuniones bilaterales con el Ministro de Infraestructuras y Recursos Minerales de Santo Tomé y Príncipe, compartiendo la experiencia de Angola en la presidencia de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP) y con entidades financiadoras como la IFC del Banco Mundial y el Banco Africano de Desarrollo (BAD) para el financiamiento de soluciones sostenibles y la experiencia conjunta de IRENA.
En el transcurso de las actividades, João Baptista Borges también mantuvo encuentros bilaterales con representantes de posibles financiadores de proyectos de energías renovables, enfocados en soluciones para el medio rural con fines sostenibles, así como iniciativas del sector privado, que aprovecharon la ocasión para manifestar su interés en participar en estos desafíos y proponer soluciones rápidas al Gobierno angoleño para la transición energética sostenible y la transferencia de conocimientos y la implementación de nuevas tecnologías.